La Residencia Escolar Virgen de la Fuensanta es un centro público dependiente de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía que ofrece la posibilidad de acoger en régimen de internado a alumnos y alumnas que cursan estudios de enseñanzas postobligatorias fuera de sus lugares de origen o a aquellos alumnos de enseñanzas obligatorias cuyas situaciones familiares o personales así lo aconsejen.
Está ubicada en la localidad malagueña de Coín, en pleno corazón del valle del Azahar, y rodeada de bellas localidades como Alhaurín el Grande, Monda, Guaro, Alozaina, etc…
Su localización es idónea ya que se encuentra situada cercana al centro urbano y rodeada de varios centros educativos de primaria y secundaria donde asisten nuestro alumnado residente.
El centro comparte instalaciones con el CEIP Pintor Palomo y Anaya. Además, se sitúa anexo al CEIP Huertas Viejas, cercano a la parada de transporte escolar del CEIP Lope de Vega, y a escasos 100 metros del IES Licinio de la Fuente, donde asiste nuestro alumnado de Educación Secundaria y Postobligatoria.
En la actualidad la Residencia está dirigida por D. Rafael García Navarro, contando con un gran equipo de educadores (maestros), personal de atención educativa complementaria, personal de cocina, conserje, etc., además de los servicios contratados de limpieza y mantenimiento. Cuenta con los correspondientes Consejo de Residencia y Junta de Actividades, así como todos los órganos de gobiernos recogidos en la normativa vigente.
Nuestra residencia acoge a niños y niñas de toda la provincia desde los 6 años hasta los 21 años para cursar sus estudios de Educación Obligatoria (Primaria y Secundaria), así como para estudios de Postobligatoria en el caso de alumnado que no disponga de la oferta educativa que desea estudiar, ciclos o bachilleratos, en centros docentes cercanos a sus domicilios.
El alumnado asiste diariamente a sus centros educativos volviendo a la residencia una vez finalizado el horario lectivo. En nuestro centro llevan a cabo las actividades básicas diarias (comida, aseo, descanso…) así como otras actividades educativas obligatorias como el estudio dirigido, talleres, actividades deportivas, salidas extraescolares, etc.
Pero lo más importante es la experiencia adquirida en más de 50 años de vida de nuestro centro donde hemos ido adaptándonos a los diferentes cambios educativos y sociales, aportando nuevas soluciones integradoras y de futuro para conseguir que nuestro alumnado consiga sus propósitos académicos y una formación global para una sociedad cada vez más compleja y exigente.